jueves, 9 de mayo de 2013
El mundo de mis sueños (y elefantes con sinusitis)
Leo me dijo hace un par de días que ya se dio cuenta de que pretendo depender de él emocionalmente. Escucharlo me dolió como le podría doler a un gran duque saber que es el hijo bastardo de un carnicero victoriano. Pero tiene razón. Es cierto.
Es estúpido. Presiento el fin y le temo y quiero cerrar los ojos pero la verdad es que yo también quiero que esto se acabe para poder bajar por fin al infierno que me ha estado esperando desde que regresé de Pozuzo, donde fui demasiado cobarde para ponerle fin.
Lo amo. Pero rezo porque sea feliz sin mí. Lo amo, pero sé que no podría soportar una vida con él, lo amo pero sé que me iría… me iría si… me iría. “You tell me, my love; it’s not love if it’s not forever. But let me tell you: a scene can be more to remember than the play itself.”
El sueño está colapsando. Las puertas del teatro mágico se están cerrando, los distintos niveles de verdad se están fusionando. Va a pasar, lo sé. Va a doler. Es el precio que tengo que pagar por mi cobardía.
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Creo q lo mas importante de todo (y creo q es parte de crecer como ser humano) es el saber reconocerse tal y como uno es, aceptarse y sobre todo tener muy presente q lo mas importante en el mundo para cada uno debe ser uno mismo.
ResponderEliminarMe da alegria saber q has podido reconocer esa importancia hacia ti misma.. Q hayas declarado tu independencia social, y sobre todo entender q la mejor compañia de cada uno.. Siempre sera uno mismo